dijous, 23 d’abril del 2015

Historias sin final feliz (VII)


Nací en un precioso castillo, rodeado por un inmenso lago de agua cristalina y altas montañas, la única entrada a este reino era un largo puente hasta el bosque. Pero incluso estando rodeada de lujos y sirvientes no todo es tan perfecto, todo ese mundo de fantasía podría llegar a su fin antes del atardecer. Mi reino se encuentra en guerra, y el rey, mi marido, ha muerto en la batalla, así que la responsabilidad de los siguientes movimientos recaen sobre mí, yo soy la responsable de que mi pueblo siga en pie o muera hoy mismo. Empiezo a ver a los soldados en el horizonte acercándose a través de la ventana, pero ¿qué debo hacer? Me encuentro en la sala de reuniones donde tantas veces se había reunido mi marido, a mi alrededor se encuentran los más fieles consejeros del reino y los más valientes nobles. Se abre la puerta y me alertan de que son mucho más numerosos de lo que pensábamos, tengo que tomar una decisión y hacer una buena jugada, y lo tengo que hacer ya… Obviamente no podemos atacar de frente, así que, habrá que preparar una buena emboscada, atacaremos desde arriba de las colinas justo antes de que lleguen al bosque, sí eso será lo mejor.
Ya estamos listos, un gran ejército armado, se dirige hacia el campo de batalla. Sin embargo, antes de que lleguemos a la colina, el enemigo nos asalta por sorpresa, se habían preparado muy bien, conocían el terreno de juego. Veo la sangre roja derramándose de mis soldados, no puedo permitir esto, debo proteger a mi pueblo y a mi familia, tenemos que resistir hasta que quede el último de nosotros. Pero de repente una flecha me alcanza atravesándome el estómago y caigo del caballo, rápidamente me arranco la flecha y sigo luchando, pero una segunda flecha me atraviesa, y vuelvo a caer… En el suelo, mientras doy mis últimas respiraciones, el tiempo se para, no soy consciente de lo que ocurre a mi alrededor, giro la cabeza hacia mi hogar y veo como se acercan, todo esto ha sido culpa mía, si hubiera elegido la opción correcta quizá no hubiera pasado nada de esto…